“Para las mujeres y niñas en toda sus diversidad: Derechos, Igualdad y Empoderamiento” (Lema propuesto para el 8M 2025 por la ONU)
¿Por qué se marcha?
Como todos los años, miles de ciudadanos y ciudadanas de todo el mundo, conmemoramos el Día Internacional por los Derechos de las Mujeres Trabajadoras, el cual nació no por iniciativa de las autoridades que debían regular en la materia, sino por la dolorosa muerte evitable de 129 mujeres trabajadoras, que lo hacían en condiciones inhumanas. Hito que marcó la historia para siempre y hoy, más de 50 años después continúa la lucha por la conquista de derechos de las mujeres, por la igualdad de oportunidades, por el real acceso a puestos de poder y el achicamiento de la brecha salarial entre mujeres y varones, sólo por nombrar algunas.
En la Argentina, las mujeres ocupan sólo el 27% en puestos de poder y existe un 27.7% de brecha salarial para mismos puestos de trabajo a diferencia de los varones.
Sumado a esto, las mujeres realizan en un 89.4% más que los varones tareas de cuidados -según el INDEC- que incluye fundamentalmente la crianza de las niñeces y adolescencias, con todo lo que eso engloba.
El 8M es una fecha crucial para visibilizar las desigualdades de género que persisten en nuestra sociedad. Una de las más arraigadas es la sobrecarga en las tareas de cuidado que recae desproporcionadamente sobre las mujeres, como vimos en el párrafo anterior.
Las tareas de cuidado, históricamente asignadas a las mujeres, tienen un impacto significativo en su crecimiento laboral y profesional. Esta carga desproporcionada de trabajo no remunerado limita sus oportunidades y genera desigualdades en el ámbito laboral. Por nombrar algunos:
Menor disponibilidad de tiempo: Las tareas de cuidado consumen una gran cantidad de tiempo, lo que reduce la disponibilidad de las mujeres para invertir en su desarrollo profesional, como capacitaciones, etc.
Dificultad para asumir puestos de responsabilidad: La exigencia de horarios flexibles y la disponibilidad para viajes o traslados dificultan que las mujeres con responsabilidades de cuidado puedan acceder a puestos de mayor jerarquía.
Brecha salarial: La interrupción de la trayectoria laboral debido a las tareas de cuidado, así como la dificultad para acceder a puestos de mayor responsabilidad, contribuyen a la brecha salarial entre hombres y mujeres.
No podemos hablar de soluciones rápidas ni en un 100% efectivas, pero sí existen varias posibles como la Redistribución equitativa de las tareas de cuidado fomentando la corresponsabilidad en el hogar y promover la participación de los hombres en las tareas de cuidado, Políticas públicas de apoyo: Implementando políticas que garanticen el acceso a servicios de cuidado asequibles y de calidad, así como permisos de paternidad y maternidad equitativos, Promover un Cambio cultural que valore el trabajo de cuidado y reconozca su importancia para la sociedad, Flexibilidad laboral para que las mujeres puedan conciliar sus responsabilidades laborales y familiares.
No es un día más, es un día para visibilizar, para luchar por la igualdad de género real en nuestra sociedad, para sensibilizar y por sobre todas las cosas, para marcar el camino de las luchas presentes y las que quedan por dar.