El informe presentado por la provincia de Buenos Aires muestra números que alarman, pero también, representa el avance que se viene configurando en materia de demostración de la importancia que reviste la visibilización de los distintos tipos de violencia, y la necesaria denuncia.
Las víctimas de violencia, históricamente no denuncian los hechos, fundamentalmente por las represalias del victimario, pero también porque no estaba garantizada de manera integral su seguridad e integridad. Pero también, juega un papel preponderante la incertidumbre que representan las consecuencias en la vida cotidiana con posterioridad a la denuncia.
Desde el Estado tanto Nacional como Provincial, especialmente con la creación de los Ministerios de Mujeres y Diversidades, se ha realizado un importante avance respecto a la visibilización, sensibilización y puesta a disposición de múltiples mecanismos para garantizar la integridad y protección de los derechos de las víctimas. Queda mucho por hacer, pero hoy tenemos menos miedo que ayer.